El negocio del hambre: así se roban la plata de la comida de los niños de CABA.
En medio de la pandemia, el legislador de CABA Santiago Roberto denuncia que se han pagado más de $500 millones por sobreprecios en la Canasta Escolar Nutritiva para los estudiantes de las escuelas de la Ciudad. Mirá los documentos y la editorial de Tomás Méndez.
Por el contexto de crisis y la interrupción de la asistencia a las escuelas, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires licitó la provisión de comida para los estudiantes de las escuelas locales.
Hasta el retorno de la asistencia a clases, el servicio contemplaba 3 comidas diarias (desayuno, almuerzo y refrigerio) y serían entregadas en 3 distintas canastas cada 15 días.
Agenda de contrato de la Canasta Educativa Nutricional quincenal de CABA.
Agenda de contrato de la Canasta Educativa Nutricional quincenal de CABA.
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Agenda de contrato de la Canasta Educativa Nutricional quincenal de CABA.
Agenda de contrato de la Canasta Educativa Nutricional quincenal de CABA.
Agenda de contrato de la Canasta Educativa Nutricional quincenal de CABA.
De acuerdo a la información oficial, el costo de la canasta de los almuerzos tiene un valor unitario de $1.400. La vianda está constituida por fideos, arroz, lentejas, arvejas, aceite, pure de tomate, lata de pescado (que se entregaron vencidas la última entrega), quedo rallado, flan, azúcar y algunas verduras.
Agenda de contrato de la Canasta Educativa Nutricional quincenal de CABA.
Agenda de contrato de la Canasta Educativa Nutricional quincenal de CABA.
Sin embargo, no sólo la cantidad de alimentos resulta escasa para cubrir los almuerzos de 15 días, sino que tampoco es nutricionalmente suficiente, de acuerdo a un reciente fallo judicial al respecto.
Además, según denuncia Santiago Roberto a partir de una investigación realizada, los alimentos que el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires ha pagado presentarían sobreprecios de hasta el 115%.
Esto significaría que sólo en relación a las canastas de los almuerzos, el Estado pagó alrededor de $300 millones más de lo que costaría. A eso habría que sumarle que sumar otros tantos millones por los sobreprecios en las otras dos canastas.
Mirá el video y la editorial de Tomás Méndez
