Ella también envió material bélico a los golpistas de Bolivia
Es María Paula Romo, exmilitante de izquierda, devenida a superministra de un gobierno de derecha en Ecuador. Estuvo a cargo de la sangrienta represión a las protestas de octubre de 2019, y le adjudican responsabilidad por 11 muertes y 1500 heridos por balas policiales. En este informe, vas a poder leer el remito que firmó cuando su gobierno le envió material bélico a los golpistas de Bolivia. Como ves, el paralelismo con nuestra Pato criolla es sorprendente. Y la manera en que la sigue protegiendo la derecha latinoamericana, también. De todo eso te vas a enterar si leés esta nota hasta el final.
Hay una Patricia Bullrich en Ecuador. Se llama María Paula Romo.
También surgió de movimientos de izquierda. También se pasó de bando. También terminó en la derecha extrema. También fue ministra de seguridad. También fue mala leche. También tiene muertos en sus espaldas.
Pero el último "también" ya te va a resultar increíble... También fue la que autorizó el envío ilegal de armas desde su país para apoyar el golpe en Bolivia.
Hoy vas a conocer el perfil de la Bullrich Ecuatoriana, mucho más joven que la nuestra, pero con un perfil y una historia muy similar.
Pero empecemos por el final. Lo que te vamos a mostrar en ADNWEB es algo que ningún otro medio nacional te lo ha mostrado hasta ahora. Seguramente han estado demasiado ocupados batiendo el parche a favor o en contra de Alberto por aquella foto en Olivos. Prioridades.
¿Te acordás aquella nota del general boliviano agradeciéndole al gobierno de Macri el envío de material bélico para los golpistas de Bolivia?
Lo que vas a ver ahora es una nota similar, que en este caso compromete seriamente al gobierno de la derecha ecuatoriana que encabezó Lenin Moreno, y que se proyectó en el actual presidente Guillermo Lasso.
Es una nota fechada el 16 de noviembre de 2019, es decir, seis días después de concretado el golpe contra Evo Morales y sólo un día antes de la segunda de las masacres, la de Sacaba.
La nota es remitida al nuevo ministro de Defensa del gobierno de facto de Bolivia, Luis Fernando López. "En atención a la solicitud dirigida a esta Cartera de Estado, en relación al préstamo de material antidisturbios y su posterior devolución, informo que, en virtud del principio de reciprocidad internacional, el Ministerio a mi cargo, por medio de la Policía Nacional hará llegar su requerimiento de acuerdo a las especificaciones pertinentes”, dice el oficio.
Debajo, la ampulosa firma de María Paula Romo Rodríguez, ministra de Gobierno de Ecuador.
Un día antes, el 15 de noviembre, un avión de la Fuerza Aérea Boliviana había aterrizado en Quito para retirar una importante cantidad de armamento bélico y químico, valuado en más de un millón de dólares.
También en este caso hubo lista y precisión de los materiales "aportados" a los golpistas, que ya habían concretado la primera de las masacres de Senkata y Sacaba, y se preparaban para concretar la segunda, con el saldo de al menos 35 muertes.
¿Qué material le aportó la Bullrich Ecuatoriana a la dictadora Jeaninne Añez? La lista es precisa:
- 5000 Granadas Lacrimógenas de Mano GL-302
- 2389 Proyectiles Largo Alcance 37 mm CS (lacrimógenos)
- 560 Proyectiles Corto Alcance 37 mm CS (lacrimógenos)
- 500 Granadas de sonido y destello para exteriores
Parte de este material era de industria brasilera, y a diferencia del caso argentino donde se trató de una donación, en este caso las autoridades ecuatorianas las entregaron en calidad de préstamo. Se ve que el amor por los golpistas no tuvo la misma enjundia que el que demostraron Macri, Bullrich y Aguad, que no sólo le regalaron a Añez y compañía casi 4 toneladas de material bélico, sino que además vino con envío incluido. Detalles, nada más.
Pero volvamos a la figura política que pone la firma para que el cargamento salga hacia Bolivia. Te la había presentado al inicio de la nota: María Paula Romo Rodríguez.
Desde 2018, con su designación como Ministra de Gobierno, se había convertido en el rostro más fuerte del muy débil gobierno de Lenin Moreno, hombre que llegó a la presidencia con los votos de los seguidores de Rafael Correa, y decidió traicionar a los votantes ni bien asumió.
La superministra fue la responsable de la brutal represión en contra de las manifestaciones populares en octubre de 2019, anticipándose un mes a lo ocurrido en Bolivia. Desde su despacho, Romo dirigió los movimientos de las fuerzas policiales ecuatorianas para contener y reprimir las manifestaciones populares que estallaron en todo el país. Motivos había de sobra: el presidente Lenin Moreno acababa de anunciar la quita de los subsidios a los combustibles, y el país entero resistía a esa decisión.
Aquella represión, cruel, violenta, desmesurada, tuvo como saldo 11 muertos y unos 1.500 heridos, algo que por suerte la Bullrich original no se animó a perpetrar (probablemente sólo porque no tuvo la chance).
Pero a diferencia de lo sucedido en nuestro país, allá en Ecuador la Asamblea presentó un año después una moción de censura, y con el voto de 104 de sus miembros se superaron ampliamente los dos tercios necesarios para destituir a la Bullrich Ecuatoriana.
Romo, que aspiraba a ser la primera mujer presidenta de Ecuador, fue humillada por el Poder Legislativo casi a pleno y eyectada del gobierno. Actualmente enfrenta las acusaciones penales derivadas de aquellos episodios, mientras deambula por embajadas intentando reclamar su merecida cuota de cobertura por parte de la derecha continental.
Y de hecho, la viene logrando. La derecha paga, aún a los que, como Romo, hayan caído en desgracia.
Por esa razón es que la exministra fue invitada como panelista en el foro “Defensa de la democracia en las Américas”, organizado por el Interamerican Institute for Democracy. Quizás te suene, porque fue al mismo evento al que fue invitado Mauricio Macri, en un rejunte de la más rancia derecha latinoamericana, donde el expresidente también expuso anunciando el imaginario regreso del comunismo. Y de paso, tal vez lo recordás, se hizo vacunar en una farmacia cercana al lujoso Biltmore Hotel de Miami.
Esa es Paula Romo, probablemente un alma gemela de la Bullrich original argentina.
Si la justicia ecuatoriana fuera justa, debería llamarla a declarar en su propio país para dar explicaciones del insólito apoyo a los golpistas de Bolivia. Y si así no fuere, tal vez será la justicia boliviana la que -al igual que a Macri y a Bullrich- alguna vez los cite a declarar para que den explicaciones lo que hicieron en aquel sangriento noviembre de 2019.