Todo el repudio que generaron los tuits anti-malvinas de Sabrina Ajmechet, la candidata a Diputada Nacional puesta por Bullrich, se reflejó a la inversa en medios ingleses, que se entusiasman sin disimulo por la posibilidad de que entre al Congreso una diputada en favor del colonialismo.

Se frotan las manos. Es que cuando menos lo pensaban, les cayó del cielo la postulación de una candidata a diputada nacional con serias chances de meterse en el Congreso, y con la voluntad manifiesta de defender la causa Falklands. 

Y sí, por insólito que parezca, Argentina podría tener por primera vez en su historia democrática una diputada que reniegue de los derechos sobre Malvinas y que afirme sin demasiados rodeos que el archipiélago le pertenece al Reino Unido de Gran Bretaña. 

No en vano, el posicionamiento de Ajmechet fue motivo de una entusiasta nota en el sitio de noticias MercoPress, que tituló: "Una legisladora pro-Falkands en el Congreso argentino: no hay que descartarlo". Mirá.

En la nota trazan un perfil de la historiadora cuya candidatura es impulsada nada menos que por Patricia Bullrich, la misma dirigente que meses atrás dijo que a Pfizer le podríamos haber dado las Malvinas, ya que no nos pertenecen. 

“¿Una académica respetuosa de los hechos históricos y comprensiva hacia los habitantes de las Falklans, sentada en el Congreso argentino?”, se pregunta la nota del sitio inglés. Y se responde: "Ese podría ser el resultado de las primarias programadas para septiembre y las elecciones intermedias de noviembre, según algunos medios ultranacionalistas en Buenos Aires".

Bueno, de "ultranacionalistas" no creo que tengan demasiado los que postulan a esta mujer, cuya catarata de tuits de 2012 despertó unánime rechazo, al punto que el propio Eduardo Feinman le dedicó varios minutos a repudiarla. Eso sí, se debe haber confundido, porque dijo que era una candidata del Frente de Todos. En fin, tampoco le pidamos periodismo a Eduardo.

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Casi eufóricos, y a la inversa de lo que sucedió en Argentina, los periodistas del sitio que publicó la noticia describen a Ms. Ajmechet como "obviamente muy crítica con el peronismo", diciendo que "rechaza enérgicamente al kirchnerismo, considerándolo el peor gobierno de la historia en Argentina". Da la sensación que esa definición termina por enamorar al autor de la noticia, lo cual no debería sorprendernos, ¿verdad?. 

Finaliza el artículo especulando que "dado el fuerte apoyo del cual goza la líder Patricia Bullrich en Argentina y particularmente en la Ciudad de Buenos Aires, bastión de la oposición al actual gobierno argentino, se especula que Ms. Ajmechet, podría colarse y lograr tener un escaño en la Cámara Baja del congreso argentino". 

Bueno, interesante es que los muchachos de este sitio, en el medio del entusiasmo colonialista, no se hayan tomado el tiempo de reparar en lo que tuiteó esta misma mujer sobre los judíos ("Haga patria, mate un judío"). O por ejemplo cuando se lamentaba por no haber atropellado a estudiantes que manifestaban en la calle ("Desperdicié la oportunidad de atropellar a un grupito de estudiantes del Pellegrini. Sepa la patria perdonarme"). 

Tal vez cuando se enteren le vuelvan a dedicar otra elogiosa columna.

Mientras tanto, en Argentina creo que tenemos bien en claro quién es esta candidata, quién es la que la impulsa, con quiénes está en la lista, y qué tipo de política desplegó su partido, también en relación a Malvinas, cuando estuvo en el poder.