Las low-cost ponen en riesgo tu vida: los aviones de Flybondi se caen a pedazos
Ahora se comprende por qué son tan baratas: se ahorran los costos de mantenimiento y de personal. Los aviones sufren fallas gravísimas por la falta de mantenimiento que ponen en serio riesgo la vida de los pasajeros. Mirá las fotos de las investigaciones.
Distintos informes de los organismos encargados de investigar las condiciones de seguridad en el rubro del transporte aéreo han puesto de manifiesto la negligencia con la que se maneja la empresa Flybondi. Por ahorrar costos, la empresa puso en riesgo la vida de los pasajeros en repetidas ocasiones.
De acuerdo a las investigaciones, algunos de los aviones no se encuentrarían en condiciones de volar por el deterioro material. Seguir operando bajo estas condiciones es abandonarse a la suerte de que, por ejemplo, un neumático no reviente por estar completamente gastado.
Goma de un avión de Flybondi.
Otras imágenes comprueban que no existe mantenimiento mínimo de las herramientas. En un vuelo se ha cayó el tablero de control y los pilotos se vieron obligados a tener que atarlo con los cordones de los zapatos. Según el piloto Jorge Polanco, el golpe del tablero sobre la cabeza de un piloto signifcaría casi con seguridad que éste se desmayara.
Tablero de control caído.
Tablero de control atado con cordones de zapatos.
Tablero de control atado con cordones de zapatos.
La JIAAC (Junta de Investigación de Accidentes de Aviación Civil) investiga un incidente ocurrido en julio del 2018, cuando ocurrió un contacto de la zona ventral del fuselaje de un avión de Flybondi con la pista. Es decir, chocó con la pista mientras intentaba despegar. Ocurrió en el Aeropuerto Internacional de Iguazú, en la provincia de Misiones.
Informe de la JIAAC.
Al parecer, las razones se deben al deterioro de los amortiguadores y a una mala distribución de los pasajeros en la aeronave. Arriba del avión viajaban 65 personas. Esto provocó que se dañara la estructura del fuselaje.
Informe de la JIAAC.
Informe de la JIAAC.
Informe de la JIAAC.
La aerolínea de bajo costo comenzó a operar en 2017 de la mano del ex ministro de Transporte, Guillermo Dietrich. Sus primeras operaciones se realizaron desde Córdoba, a la vez que el Estado realizaba una inversión en conjunto con las empresas aéreas para abrir un aeropuerto exclusivo en El Palomar.
La empresa Flybondi sería la primera de las empresas low-cost en desembarcar en el país y ofrecer vuelos a bajísimo costo. Inclusive presionaban al gobierno nacional para que les permitieran cobrar por debajo del mínimo impuesto. Valía más comprarse un pantalón que viajar de Córdoba a Buenos Aires en avión.
Detrás de todo esto había una denuncia implícita que amenazaba con destruir el mercado local. Si estas compañías podían ofrecer vuelos tan baratos, ¿cómo es posible que las demás empresas los ofrecieran tan caros? Nos habían estado estafando, privándonos de viajar en avión…
En paralelo, desde la asunción del gobierno, Mauricio Macri y sus funcionarios denunciaban el déficit que significaba sostener una aerolínea de bandera nacional. Aerolíneas Argentinas era mucho gasto para el Estado argentino. Además, ¿por qué seguir haciéndolo, si podíamos viajar mucho más barato y sin gastos del Estado?
Se allanaba el terreno para que coparan el mercado las aerolíneas low-cost que ofrecían productos a precios competitivos internacionales. Pero claro, no todo lo que brilla es oro. A veces brillan las ruedas de los aviones de lo gastadas que están.