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Ayer se dieron a conocer los números de la inflación del mes de abril. Según el INDEC fue del 8,8%. Después de cinco meses con cifras de dos números, el gobierno consigue en abril llevar el número a un dígito. Para Javier Milei este número es celebrado como “una goleada”, mientras algunos economistas opinan que la cifra responde a la caída del consumo.

Duro de Callar conversó con el economista, docente de la UBA, Fabián Medina sobre los anuncios del día de ayer.

El economista opina que no hay nada para celebrar. Recuerda que en septiembre del año pasado la inflación era de 8,4% y supuestamente el país se encontraba “incendiado”. Hoy, nos encontramos en una Argentina “frezada”.

“En aquel momento había plata en la calle, las changas estaban a la orden del día. El plomero, el albañil que hacían trabajos en domicilios te daban turno, tenías que esperar. Hoy los llamás y en 20 minutos y están en tu casa”, dice Medina.

Claro, eso generaba plata en la calle. Hoy la recesión es enorme.

El indicador de la semana pasada de la caída de la construcción fue del 42%.

“Eso significa que la desocupación va a crecer cerca del 10% y la pobreza arriba del 71%”, agrega el docente de la UBA.

Recordemos que en la última cadena nacional, Javier Milei anunciaba que la pobreza en Argentina rozaba el 60%.

El costo social para bajar la inflación estaría siendo demasiado alto.

“Vamos a llegar a un 5%, 6% de inflación, pero a un costo social altísimo. Para que el FMI le diga al presidente que pare la mano con el ajuste, es porque es demasiado exagerado”.

“En el Menemismo lo que se hizo fue secar la plaza con el plan Bonex. Acá no hay plan Bonex pero no hay plata en la calle”, dice el economista.

En el día de ayer, luego de conocer los nuevos datos de la inflación de abril, las tasas de referencia bajaron 10 puntos y el plazo fijo a un 40%.

Esto sería para que la gente saque la plata del banco y consuma.

Pero la realidad es que lo que se hace hoy con el dinero circulante es comprar comida y pagar servicios.

Dice Medina: “Pensemos que en 2001, De la Rúa se fue con 57% de pobreza, pero con deflación, inflación negativa. La inflación no es el termómetro. La gente quiere trabajo porque es la única manera de llegar cerca de fin de mes”.

Y agrega un dato relevante: “Milei mintió con el tema de la emisión. Desde el 11 de diciembre se emitieron $17 mil billones. Dos veces por decreto para pagar las indemnizaciones del sector público y después para poder comprar a exportadores”. Fin.

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