"A ese productor que protesta no lo van a afectar las medidas", Luis Basterra sobre las retenciones.
El ministro de Agricultura de la Nación habla de las negociaciones y criterios del nuevo esquema de retenciones. Mirá la entrevista.
Hablando se entiende la gente
Una de las principales diferencias entre la aplicación del nuevo esquema de retenciones y de aquel que se planteara en 2008 es el diálogo que se intentó mantener entre los dos principales actores: el sector agropecuario y el gobierno.
En efecto, las circunstancias de la presentación de la resolución 125, que planteaba un sistema de retenciones móviles de acuerdo a la cotización de los granos, fueron muy criticadas por la falta de instancias de negociación.
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El actual gobierno parece haber tomado nota de ello. En este sentido, el ministro de Agricultura, Luis Basterra, ha resultado una pieza clave.
“Muchas de las decisiones que se tomaron tuvieron en cuenta la opinión de la Mesa de Enlace, pero también de las más de 130 organizaciones que enviaron pedidos”, Luis Basterra.
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Todos para uno y uno para todos
A su vez, esta apertura que permitió dar cuenta y contemplar la diversidad de condiciones hacia el interior del gran sector agropecuario fue la que hizo posible desarticular el pretendido reclamo general, que en realidad es exclusivo de los grandes productores de soja.
“Tenemos que llegar a las 200 mil toneladas. Lo tenemos que hacer con todos los productores y sin que determinado modelo excluya a otro”, Luis Basterra.
Como lo expresa el ministro, se hizo hincapié en el ajuste de los criterios para aplicar los impuestos atendiendo a que la presión fiscal sea más equitativa y que las economías regionales puedan hacer un aporte a la vez que progresar en su negocio.
“Ha habido una cantidad de medidas de ajuste del instrumento de derechos de exportación para que responda a este concepto de equidad territorial”, Luis Basterra.
Si se atiende al cuadro, se notará que la mayoría de los impuestos por derechos de exportación bajaron sus alícuotas.
Cuadro del Ministerio de Agricultura de la Nación.
Es que en realidad la aplicación de este nuevo esquema debería haber resultado en buenas noticias por la cantidad de beneficios para pequeños productores y economías regionales, pero los medios hegemónicos actuaron en complicidad defendiendo los intereses de los grandes empresarios.
