Milei le entrega 18 millones de usuarios al sistema bancario

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Duro de Callar conversó con Diego Giuliano, diputado Nacional por la provincia de Santa Fe, exministro de Transporte de la Nación.

El ejecutivo enviará un proyecto al Congreso de la Nación para quitarle la exclusividad a Nación Servicios del sistema SUBE en la administración del pago de los boletos del transporte público de todo el país.

La idea del gobierno es que los 18 millones de usuarios de la tarjeta SUBE puedan pagar el colectivo, el subte o el tren con tarjetas de créditos o débito.

Un negocio redondo para las entidades bancarias. Otro guiño al sistema financiero del presidente Javier Milei.

“La SUBE es una política de Estado. Ha sucedido a todos los gobiernos, lleva más de 12 años de vigencia. La idea que tenía el gobierno anterior era actualizar el plan”, dice Giuliano.

Entregarle la tarjeta SUBE a los bancos no es un negocio menor. Se maneja información sensible de los usuarios. La tarjeta guarda los datos de los argentinos que viajan a diario en tren, subte y colectivo. Cada tarjeta está personalizada. Es saber cómo se maneja cada ciudadano en su día a día.

“La SUBE es la madre de los subsidios, en el caso de que hubiera política de subsidios. Y es muy importante que existan ya que en todo el mundo existen y por varias razones”, dice el exministro y agrega.

“El transporte es un dinamizador de la economía, hace que lo público sea una opción. Evita el impacto ambiental negativo, ordena la ciudad desde el punto de vista de seguridad vial”.

Además de ser de gran ayuda al bolsillo de los trabajadores, el subsidio al transporte aporta valor a la comunidad. El ciudadano debe elegir entre las opciones de movilidad el servicio público porque como dice Giuliano, “ordena la metrópoli”.

“La SUBE es de acceso universal, se compra en un kiosko, se pide por internet, se puede utilizar con el teléfono a través de una aplicación, ya no existiría ni físicamente, el teléfono es muy universal. Eso no va a pasar con la tarjeta de débito o crédito”, expresa Giuliano.

“Esto de que sean los bancos los dueños de la SUBE tiene varios impactos colaterales. No solo la enorme información que van a manejar de los usuarios, si no la facilidad al acceso de la tarjeta. En el caso de robo o extravío por ejemplo”, concluye el exministro.

El texto se estaría discutiendo, pero la decisión política está tomada. El gobierno emitirá un decreto. Del proyecto participan la secretaría de Comercio, de Transporte y el Banco Central y ya estarían conversando con las empresas privadas involucradas para llevar un texto final a la firma del ministro de Economía y Javier Milei.

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