Tomás Méndez conversó con Antonio Aracre, economista. El tema es entre tanto revuelo con los gobernadores y las coparticipaciones a las provincias, los cambios en los planes sociales, nuevas condiciones para poder obtener los subsidios, aumento en las cuotas de los colegios privados, pre pagas y en los combustibles, ¿qué va a pasar con el salario de los argentinos?

Para el economista no es posible que en el corto plazo se venga otro “ajustazo”. El de diciembre pasado parece haber alcanzado. ¿Será así?

Aracre lo denomina técnicamente “over shocking”, es decir, una medida exagerada.

“Cuando el ministro la pensó, sabía que iba a estar varios meses utilizando ese tipo de cambio como ancla para bajar la inflación”, dice Aracre.

El cepo

El ajuste que realizó el gobierno parece pensado a mediano plazo. Cuando el tipo de cambio comience a tener cierto nivel de deterioro, en ese momento “creo que el gobierno seguramente va a sacar el cepo y ya no vamos a poder hablar de un dólar atrasado o no” dice Aracre.

Esto se relaciona directamente con el pedido del sector del agro sobre la quita de retenciones y/o la mejora en el tipo de cambio. La realidad es que Milei en campaña, prometió para el sector, la quita de cualquier tipo de impuesto distorsivo que impida las exportaciones de Argentina al mundo. Todavía no la vemos.

La gente

El ajuste que presentó el Gobierno Nacional ha tenido características muy duras para la ciudadanía. Sobre todo, para la clase media, los jubilados, los trabajadores independientes.

Para el economista este impacto ha sido sobre la clase media baja y no tanto para la clase baja en particular y explica: “La clase baja sufrió mucho en el 2001, en ese momento no existían los planes sociales no había ningún tipo de cobertura que hoy sí tienen. Además, en ese momento había un 20% de desocupación que por el momento no tenemos”.

Ese “por el momento” es peligroso, porque sabemos que los índices de despido han subido en el sector público, en las empresas constructoras y las relacionadas de manera directa a la construcción. No se espera crecimiento para este año en el país, este es un indicador de no generación de empleo. Esperemos que al menos se mantenga el techo de desocupación.

Salarios

Venimos leyendo y escuchando que los meses más duros van a ser marzo y abril, sin embargo estamos atravesando el mes de mayor brecha en el poder adquisitivo, quiere decir que los ingresos y los cambios en los costos de la economía (sobre todo en alimentos y servicios) , tienen la “amplitud máxima”.

Pero Aracre es optimista. En marzo los jubilados van a percibir un aumento y algunos salarios se van a comenzar a acomodar por las paritarias, “con cierto grado de lentitud, pero en mayo y junio vamos a comenzar a ver que los ingresos se acomodan” ¿cómo quisiéramos?, se pregunta el economista, “No, si no, no se trataría de un ajuste”.

La realidad es que el Gobierno oficializó el aumentó del 30% sobre el salario mínimo vital y móvil que se aplicará en dos tramos: febrero y marzo. El valor pasará de $156.000 a $180.000. En marzo, el sueldo básico subirá un 12% y llegará a $202.800.