La quita de retenciones a las economías regionales se hace efectiva desde el primero de septiembre
El Gobierno oficializó la eliminación de retenciones para las economías regionales. De esta manera se hace efectiva la medida prometida por el ministro de Economía, hace un par de semanas.
Consultado por el periodista Tomás Méndez, el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan Bahillo, opinó que la eliminación de las retenciones abarca el 95% de la industria de economías regionales, no quedando prácticamente productores fuera de la nueva medida.
Los sectores que abarca la disminución de los aranceles son: cáscaras de cítricos, jugos y esencias cítricas, vinos, papa industrializada, jugo de uva, arroz sin cáscara procesado, arroz descarrilado, extracto de roble y quebracho, maní sin cáscara, aceite de maní, sábalo y tabaco.
Bahillo manifestó que las cámaras y los productores reclamaban estas medidas, aunque en su opinión: “Las alícuotas eran muy bajas. Para los cítricos y aceites esenciales era del 12% y las demás alícuotas rondaban entre el 4% y 6%”.
Además, mencionó que es una medida que reconoce la importancia que tienen las economías regionales en la matriz productiva; el valor agregado que desarrollan con la generación de empleo directo, el fortalecimiento, el arraigo y permanencia de la población rural en cada región de nuestro país y el grado de tecnificación e inversión de las industrias del interior.
Consultado sobre la incidencia que el dólar soja está teniendo en la economía, el funcionario opinó que es demasiado pronto para tener un panorama real. La idea, como se ha manifestado anteriormente en otras conversaciones con el periodista Tomás Méndez, es poder cumplir con esta nueva medida, la expectativa del gobierno de recaudar más de 2 millones de dólares para acrecentar las arcas del Banco Central.
Al finalizar, el secretario de Agricultura Ganadería y Pesca dejó en claro que la cadena de la soja exporta alrededor del 92% de lo que se produce en el país, con el agregado de valor de la harina soja y aceite de soja y sumó: “Vale aclarar que la soja sí aporta valor, ya que hay una creencia popular de que esto no es así, sin embargo tiene un proceso de industrialización que requiere de mucha mano de obra y capacidad industrial”.
Escuchá la nota de Tomás Méndez en Duro de Callar