La corrupción mata: sacaron créditos por US$300 millones para urbanizar la Villa 31, no se hizo nada y pagaron más de $400 millones en "asesorías"

En la gestión del Pro al frente de la Ciudad de Buenos Aires, el Banco Mundial y el Banco Interamericano concedieron créditos por un total de 300 millones de dólares para la urbanización de la Villa 31. ¿Dónde está esa plata? Gran parte se destinó a "asesorías y consultorías" realizadas por ONGs que ellos mismos creaban.

Diego Fernández es Secretario de Integración Social de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Es, o era, el encargado de implementar los planes de urbanización en las villas.

Tal como él mismo lo prometía en los medios, para fines del 2018 la Villa 31 contaría con “la misma infraestructura que la Ciudad de Buenos Aires”. La mentira es tan evidente como que al día de hoy esa población no cuenta con agua potable.

Las mentiras de Diego Fernández

Con la excusa de un proyecto para urbanizar la Villa 31, conocida también como Barrio Padre Mugica, se gestionó financiamiento internacional: un crédito del Banco Mundial por 200 millones de dólares y un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo por 100 millones de dólares más.

La corrupción mata: sacaron créditos por US$300 millones para urbanizar la Villa 31, no se hizo nada y pagaron más de $400 millones en "asesorías"

Resolución sobre el Crédito del Banco Interamericano de Desarrollo.

En el informe del Banco Mundial que incluímos debajo se hace hincapié en la accesibilidad al agua potable. De acuerdo al relevamiento, en 2017, 0 personas de la Villa 31 tenían acceso a agua potable. Lo mismo sucedió hasta noviembre de 2019. El Banco avisaba que, de acuerdo al proyecto, para junio del 2023 debería haber 43.190 personas con acceso a agua potable, pero no se avanzaba en nada. Ya conocemos la situación actual.

Reporte y proyecto del Banco Mundial por el crédito de 200 millones de dólares.

¿A dónde está esa plata? Gran parte se fue en asesorías fantasmas.

Lo peor: a esas asesorías las llevaban a cabo ONGs a cargo de familiares y amigos. Una de esas ONG es CIPPEC, a cargo de Nicolás Ducoté, exintendente de Pilar, y Miguel Braun (de la familia de Marcos Peña Braun).

Mirá la explicación de Tomás Méndez

Fundaban ONGs para robarse la plata de créditos que pagaremos todos y que sacaban con la excusa de los pobres. El cinismo les queda corto.

Sírvase usted mismo de leer las siguientes resoluciones que aprueban todo tipo de consultorias, asesorías y proyectos. No deje de leer también los montos, algunos en miles y millones de dólares. Pregúntese cómo estarían los barrios postergados si esa plata se hubiese destinado a mejorar las condiciones de urbanización y no a llenar los bolsillos de los amigos del Pro.

Resolución del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Por último y como si fuera poco, se ve que estaban tan apurados por ir a trabajar por las mañanas que no podían desayunar en sus casas y la Secretaría de Integración Social y Urbana contrató un servicio de catering por $80.000.